Historia de PI
Historia de Pádel Independiente
Empezamos a jugar al pádel por razones muy parecidas a las de todos los demás; para olvidarnos de campañas comerciales siempre con pocos recursos, sesiones nocturnas delante del ordenador para intentar entregar a tiempo, oficinas de proyectos que siempre se retrasan o sistemas que nunca funcionan bien. Además, nos divertíamos, y mucho.
Nos encontramos, jugando al pádel, claro, allá por el 2010. Patricia y Marta, amigas desde hacía años, conocimos a Raquel en uno de los rankings que se organizaban en Las Rozas, Cristina era compañera de clase de Patricia. Nos divertíamos jugando juntas, y empezamos a hacerlo con frecuencia. A principios de 2010, en uno de nuestros partidos, hartas de quejarnos de los fallos de organización de los rankings -tenían más ánimo de lucro que de diversión-, nos decidimos: montaríamos uno. Eso sí, tenía que ser divertido. Arrancamos ese mismo año, con 20 parejas que “reclutamos” con el boca a boca; y, vaya si nos divertimos.
Así nació Pádel Independiente. Fase tras fase, nos fuimos encontrando con más y más “padeleras” con la misma intención: divertirse. Llegaron tantas que tuvimos que poner límite. Hoy, 80 parejas lo pasan bien jugando, acompañándonos en las fiestas de entregas de premios, participando en los torneos temáticos, y hasta viajando juntas.
Es pádel, sí, y mucho más.
